Por Claudia Vargas Ribas
Resumen:
Las migraciones son procesos naturales del ser humano, sin embargo, en el siglo que transcurre factores como la globalización han sido determinantes para su interpretación, sumado -como es el caso de los países en desarrollo de América Latina y entre ellos Venezuela- a factores internos del contexto que tienen que ver con la situación social, económica, política, cultural y el momento histórico. El caso de Venezuela ha tenido una transformación pues pasó de ser un país receptor de inmigrantes durante el siglo XX a uno emisor de personas, cuya característica general es su alta calificación, aun así el deterioro progresivo de las condiciones internas ha generado no sólo que este proceso se mantenga en continuo crecimiento sino que el país actualmente se encuentre con grandes posibilidades de perder de forma definitiva su capital intelectual y su fuerza de trabajo. Sí a esto se le suma la falta de data oficial, políticas públicas y estatus quo de la situación en Venezuela se corre el riesgo de no poder contar con personas para su desarrollo interno en el mediano y largo plazo y también afectar la dinámica en algunos países de la región, sobre todo los fronterizos, los cuales no están preparados para recibir esta gran oleada migratoria.