Tema a tratar: “Más allá del claustro. Experiencias alternativas de Co-construcción de conocimientos“.
La interrogación siempre asoma en el tumulto del desconcierto, sensación que acontece cuando el claustro científico no ha dado suficiente respuesta a lo inusitado, lo inasible o desconcertante socialmente.
Si como pensamos la ciencia, especialmente las ciencias sociales, se compone con tres cuerpos relevantes: los productores, sus instrumentos y sus contenidos productivos, podría afirmarse que el cuerpo real de sus productores ha quedado contemporáneamente sometido a la lógica del sistema donde prima los cupos, la competencia y las métricas e ignorado su composición intersubjetiva como parte inescindible del método. Método éste regido por el síndrome del individualismo epistémico, que comprende y supera en su práctica al individualismo metodológico.
Desde diversas autorías sin embargo ha comenzado a señalarse que dichos obstáculos que pesan sobre investigación deben superarse prestando atención contextual al cuerpo productor, y ya no refieren sólo a un cuerpo singular sino a un cuerpo plural. A vez que se trata de coproducir el propio intelectual colectivo.